No
tomo agua porque me oxido y si me oxido me hago viejo. Siempre escuchamos esto como pretexto para no tomar agua,
pero ¿quién es el culpable? A partir del momento que nacemos nos estamos
oxidando, el culpable de la oxidación es la misma que nos hace estar vivos, el oxígeno…
hey hey espera, ¿el oxígeno?
Nuestro
cuerpo necesita oxígeno, es obvio, pero también puede ser toxico, esto se debe
que el oxígeno participa en muchas reacciones de oxidación que generan los famosos
Radicales Libres, estas moléculas son tan inestables que casi inmediatamente
tienen que secuestrar un electrón a otras moléculas, cambiando su función
principal generando daño celular.
En
resumen, los radicales libres siempre están atacando y dañando nuestras células
todo el tiempo, en la piel hacen vernos más viejos, en nuestro organismo puede
incluso a facilitar la presencia de muchas enfermedades.
Entonces,
¿siempre nos estamos oxidando?
Tenemos
sistemas antioxidantes que nos ayudan a evitar los daños que los radicales
libres nos puedan generar pero siempre le podemos dar una ayuda extra
consumiendo antioxidantes a partir de nuestros alimentos, frutas de colores
rojizos y azules, verduras de colores naranja son excelentes fuentes de
antioxidantes
Recuerden
que, para verse joven, una dotación de colores.